Un espacio para gente con ganas.
Crear es «hacer nacer algo o darle vida». Lo dice la RAE y La Platanera lo materializa. Te explicamos cómo.
«Siempre creí que las historias nacen de cosas pequeñas. Tan pequeñas como esta isla en la que nací y donde crece La Platanera».
Andrea o Avi es contadora de historias y emociones. Cuando la ves al otro lado de la pantalla, se percibe fortaleza y mucha pasión. Parece que lo que cuenta, su proyecto, la trasciende.
Su amor por las historias la llevó a crear La Platanera, un estudio creativo «reciclado» – el cuarto de aparejos de pesca de sus abuelos –, con todos los recursos de los que disponía y con la ayuda y confianza de su madre.
Se dio la oportunidad de vivir de sus diseños, de estar en contacto con la gente. Fluyó y dejó que el taller le fuera hablando, lo que le permitió caminar sin prisa y entender su para qué.
La Platanera es un estudio serigrafía creativa y un lugar para desconectar. Allí puedes encontrar clases, cursos, intercambio de experiencias y creación. Un punto de encuentro donde reconectar, crear, y compartir saber hacer y vivencias.
La Platanera, filosofía de vida
Avi empezó por necesidad en 2012. Con pasitos tímidos, inauguró el taller un año después. «Para mí –dice– no es un proyecto con el que ganarme la vida, es el lugar donde decido vivir. Es mi filosofía de vida. Un espacio para explorarme, conocerme más y desarrollar mi creatividad».
La Platanera, taller para emprendedoras
Hay muchas razones para visitar y crear en La Platanera. Porque es un espacio donde las historias nacen solas, gracias al realismo mágico de la isla de Arousa. Porque tiene todos los ingredientes para ayudarte a reconectar y, por tanto, a que tu proyecto emprendedor crezca. Y porque puedes desarrollar tu talento creativo y aprender serigrafía sobre textil, cerámica y papel. Además, puedes encontrar muchos más talleres con artistas invitados.
Y, para las creadoras (y creadores) y artistas, ofrece becas autogestionadas para «experimentar, compartir conocimientos y producir obra». ¿Condiciones? Actitud y tener algo que contar.
Lo que emprender le ha enseñado
Más que emprender, ha sido vivir en una isla lo que le ha hecho combatir el miedo y la incertidumbre constantemente. Porque Andrea ha viajado, ha vivido lejos de su hogar y ha explorado nuevos mundos para valorar lo que tiene. ¿Y qué le ha enseñado? A vivir el presente y ser fuerte.
Ella cree en lo que hace, y está segura de que es el ingrediente esencial para perder el miedo. Desde siempre ha tenido incorporado el «por qué no». Porque el NO ya lo tiene. Y como hace las cosas desde el amor y conectada con lo que quiere y es, la gente lo respira y lo nota. Y le tienen en cuenta. Andrea vive con su verdad.
El básico de una emprendedora
Le preguntas qué es esa cualidad esencial que se le presupone a una emprendedora y responde rápido, con decisión. «TENER CLARO LO QUE QUIERES y responder a estas cuatro preguntas: ¿quién eres? ¿qué quieres hacer? ¿qué quieres contar? ¿para qué?». Contestarlas –dice– hace que no te sientas perdida, porque dentro de ti sabes lo que quieres hacer.
Si tienes un proyecto, mantén…
La autoestima, nos dice. La suya se basa en sus experiencias de vida. Las negativas le han hecho más fuerte. ¿Y cómo la trabaja? A través de la creación, de la escritura, de leer, de rodearse de gente que le pueda aportar y con la que conecte. E ingrediente esencial: escuchar y estar abierta. Fluir.
Comer dentro de una historia…
Andrea ilustra todo desde su óptica de isla y de mar. Organiza talleres con artistas invitados, retiros artísticos y clases personalizadas para proyectos de emprendedoras: packaging, serigrafía de cerámica, de papel o de textil, …
La Platanera es un reducto creativo para gente con ganas. En verano, organiza residencias artísticas Banana, donde cinco personas muy distintas se descubren y experimentan una nueva forma de hacer.
Cuando crea, le gusta contar historias de naturaleza, mar y personajes mágicos. Ilustra sobre cerámica porque las piezas que crea forman parte de la vida de la gente: «Me gusta que mis creaciones se usen, se puedan tocar o comer sobre ellas».
«Trabajar con las manos es un ejercicio de liberación mental»
En un proyecto emprendedor, tú eres lo más importante. Y eso Avi lo tiene claro. Las personas que van a La Platanera descubren algo de ellas mismas que después pueden utilizar para su proyecto. Es casi un ejercicio de mindfulness.
Andrea es Avi, es la mujer detrás de La Platanera, es la buscadora y la creativa, es la contadora insaciable de historias, es la soñadora, y es la inspiración.
«El taller me ha enseñado a ir despacio, a acabar al ritmo de las cosas, a mirar hacia dentro y preguntarme qué quiero hacer. Sé que no es el camino más fácil, pero sí el que me hace feliz»
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